y el voto de Nazir del Hijo amado,
oh Virgen del despojo, bella nada,
respuesta fiel, amor en vida y canto.
Humilde sierva, pobre en Nazaret,
y pobre en el misterio de tu parto,
tu nada es transparencia,
epifanía de la única riqueza, que es regalo.
Figura de los pobres, de la Iglesia,
viviente profecía de salvados,
el pueblo bendecido por el Hijo
en pos de ti camina tras tus pasos.
Los ricos, los potentes, los soberbios
del trono caen, caen derribados,
y yérguese la esclava, la humillada,
diciendo la grandeza del Dios santo.
Oh Virgen Pobre, llena de su gracia,
ungido el corazón, humilde y manso,
lo tienes todo, vaso preciosísimo,
teniendo a Dios contigo en tu regazo.
¡Cantemos con María al Bondadoso,
que el canto fue a los pobres regalado:
a Dios sea la gloria, no a nosotros,
y se haga su divino beneplácito! Amén ■
P. Rufino Mª Grández, ofmcap.
Laguna de Cameros (La Rioja), noviembre 1988.