Dónde estás ahora? Esta
pregunta tiene una magnífica respuesta: estamos donde reposa
nuestro corazón... Quizá teme el hombre hallarse ¡tantas veces! donde no
quiere... Y, sin embargo, esto es imposible porque... "más está el alma
donde ama que donde anima". Y esto, desde Platón, lo han enseñado todos
los grandes maestros espirituales. Estás allí donde quieres y tu corazón elige,
allí mismo, donde amas, donde está tu reposo y tu predilección, aunque los
senderos exteriores de este mundo sean harto ásperos y los ideólogos y los
maestrillos cercanos y lejanos pretendan otra cosa. Nadie te quitará esa
LIBERTAD de tu alma... Aunque presionen unos y otros y te quieran calificar al
antojo de la moda, o del miedo, o de la necedad, tan frecuente. Permanece firme
donde están los verdaderos bienes y no te dejes arrastrar por las estructuras,
que siempre se procuran justificativos del corte que sean. Estás donde se halla
tu corazón y donde tu alma desea. Desea estar en lo alto, "sobre toda temporal
creatura levantada", como decía San Juan de la Cruz, y llegarás en un
instante al punto maravilloso que descubre la virginidad de tu alma. Habita la
parte escondida del mundo, que es el camino del Cielo ■ un ermitaño urbano