Altar de San José de la Iglesia
de San Bernardo (Sevilla) ■ La devoción a San José se fundamenta en que este hombre fue
escogido por Dios para ser el esposo de María Santísima y hacer las veces de
padre de Jesús en la tierra. Durante los primeros siglos de la Iglesia la
veneración se dirigía principalmente a los mártires. Quizás se veneraba poco a
San José para enfatizar la paternidad divina de Jesús. Pero, así todo, los
Padres (San Agustín, San Jerónimo y San Juan Crisóstomo, entre otros), ya nos
hablan de San José. Según San Callistus, esta devoción comenzó en el Oriente
donde existe desde el siglo IV, relata también que la gran basílica construida
en Belén por Santa Elena había un hermoso oratorio dedicado a nuestro santo.
San Pedro Crisólogo habla de san José como “hombre que posee todo género de virtudes". El
nombre de José en hebreo significa "el que va en aumento ■