Decía Maister Eckhart: (...) "tú debes necesariamente ser en la esencia y habitar en el fondo. Es allí
donde Dios debe tocarte, en la simplicidad de su Ser, sin el intermediario de
ninguna imagen. "Por sí misma una imagen no muestra ni significa nada. Ella
refiere y reenvía totalmente a aquello de lo cual es imagen." (Sermón 101) Estamos, pues, invitados a no
quedarnos a mitad de camino, sino a seguir, sin desfallecer, a pesar de lo que
pueda turbar nuestra peregrinación cotidiana. Porque en esa maravillosa
simplicidad, en el abandono y en todo desasimiento, se nos abre el camino
esencial que no nos es posible definir... Sería un error rodear de murallas, de
pretender circundar esa inmensidad abierta desde el corazón. R. Rolland hablaba
de "sensación de lo eterno", de "sentimiento oceánico", que
es un "contacto", un "hecho"... No nos detengamos pues en
la puerta ●
No hay comentarios:
Publicar un comentario