Oh tú que te sientes lejos de la tierra firme,
arrastrado por las olas de
este mundo,
en medio de las borrascas y de las tempestades,
si no quieres
zozobrar no quites los ojos
de la luz de esta Estrella e invoca a María.
de la luz de esta Estrella e invoca a María.
Si se levantan los vientos de las tentaciones,
si tropiezas en los escollos
de las tribulaciones,
mira a la Estrella, llama a María.
Si eres agitado por las ondas de la soberbia,
si de la detracción, si de la
ambición, si de la emulación,
mira a la Estrella, llama a María.
Si la ira, o la avaricia,
o la impureza impelen violentamente la navecilla
de tu alma,
mira a María ■
San Bernardo de Claraval
San Bernardo de Claraval